Puesto que hoy es el día de la madre y ha coincidido con el puente del 1 de mayo tenía algo de tiempo para preparar alguna cosita para mi madre.
Me sobraron cajas vacías de palomitas del cumpleaños de mi hijo (tengo pendiente la entrada) y decidí hacerle una cesta decorada para poner dentro unas pastas o galletas hechas por mí. Como siempre al final no he podido ponerme el delantal de repostera y el relleno ha cambiado completamente. A mi madre le encantan las golosinas y sus favoritas son las nubes. Ayer tenía la caja terminada y nada que meter dentro, así que me fui a comprar nubes y he solucionado más o menos el invento (queda pendiente hacer alguna con pastas o galletas).
He de decir que no tenía muchos recursos de manualidades. Estoy fuera de casa y me he traído lo justo para hacer un diademero que tengo pendiente. Por tanto he tenido que limitar la decoración a los materiales y colores del diademero (mi falta de previsión no cambiará nunca).
Primero os muestro el resultado final y luego el paso a paso. Aquí tenéis la cesta decorada llenita de nubes. Estas cajas las conseguí en la tienda online "monouso". Son las cajas de palomitas de tamaño pequeño y por el formato caben bastantes chuches.
Y ahora vamos con el tutorial. Necesitamos:
- 1 caja vacía de palomitas de color blanco.
- Plantillas de la figura que queramos realizar.
- Goma eva de color rosa.
- Pintura acrílica rosa claro y carmín.
- Rotulador permanente blanco.
- 1 pincel de esponja o, en su defecto, un trocito de esponja de estropajo o esponja de baño.
- Tijeras de picos para el cartel.
- Pistola de silicona.
- 1 pajita de refresco.
- Nubes y una bolsita de celofán para ponerlas dentro.
Comenzamos. Aquí tenéis las plantillas de algunas figuras que pueden realizarse. Yo al final he usado el lazo.
Marcamos con un palito de brocheta la plantilla sobre la goma eva. Dibujamos el lazo, unos rabitos, y el círculo central. También cortamos unas tiras rectas que harán de cinta alrededor de la caja.
En la gomaeva se marcan muy bien los contornos.
Los recortamos con unas tijeras afiladas. Para trabajar con gomaeva y que quede el corte perfecto, siempre hay que llevar las tijeras totalmente rectas. Si las inclinamos al cortar la figura no quedará del todo bien.
La verdad es que las cajitas dan mucho juego.
Le damos forma con los dedos para que tengan volumen aprovechando la facilidad de moldeado que tiene el material.
¿Veis la diferencia entre las piezas moldeadas y las que no?
En una paleta ponemos un poco de pintura acrílica rosa claro y una gotita de carmín.
Mezclamos teniendo cuidado de sólo poner una cantidad pequeñísima de carmín (colorea demasiado) y mojamos el pincel de esponja. Retiramos el sobrante sobre un trozo de papel absorbente y vamos pasando el pincel por todos los bordes.
Con el extremo del pincel delineamos los dobleces del lazo con el fin de dar volumen. Como veis, sólo con sombras se consigue dar vida a un simple trozo de gomaeva.
Con un rotulador permanente blanco dibujamos unos puntitos en todas las piezas.
Con la pistola de silicona (¡qué haría yo sin ella!), pegamos las piezas a la caja. Primero las cintas rectas, luego los rabitos del lazo, después el lazo y por último el círculo central.
Me encanta el resultado con los sombreados en la gomaeva. Me da la sensación de que es un dibujo.
Aproveché para realizar los adornos del diademero a la vez que hice el lazo. En la caja también quedaban perfectas las mariposas o las flores. La realización es idéntica sólo que en esas piezas se mezcla rosa y beige.
Con un trocito de gomaeva blanca y otro de gomaeva rosa cortado con las tijeras de picos hacemos un pequeño cartel. Lo pegamos a una pajita de refresco fucsia con la pistola de silicona.
Ahora ya sólo nos queda poner nubes en una bolsita de celofán y colocarlas en el interior de la caja.
Con una cinta de goma eva hacemos una especie de asa que pegamos con la pistola de silicona y ya tenemos nuestra cestita de chuches.
Aprovecho para felicitar a todas las madres del mundo y desearos un feliz domingo.